Pasé mucho tiempo en esta ciudad buscando el cielo en los charcos
Entraba el otoño por tu balcón, gotas de ácido en la sangre
En las noches más largas das con la luz que hiela las mañanas y apunta al sur
Tus sueños son veleros, buscan el sol, tengo en mis manos tu corazón
Vino una gran tormenta y nos arrastró hasta las puertas del infierno
Yo me dormí en tus brazos y al despertar el mundo nos hizo pedazos